viernes, abril 11, 2008

Valorar el cine aunque no nos guste


Hace mucho tiempo que quería escribir una entrada como ésta. Y ahora que ya lo he hecho, viendo el resultado, no es que me sienta del todo satisfecho pero probablemente, para quedar en paz conmigo mismo, debería llenar varias hojas y seguramente nadie se aventuraría a leerlo.
El por qué me he decidido finalmente quizá haya venido provocado por haber mencionado en mi post anterior a Michael Moore, lo cual me ha hecho recordar los dias de Farenheit 9/11. No lo se. En cualquier caso allá va:

Es buena. Es mala. Me ha gustado. No me ha gustado. Le doy cinco estrellas. Le doy una bolita. Es una obra maestra. Es un bodrio infumable. Es buenísima. Es una puta mierda. Etc.
Todas estas expresiones y muchísimas más se utilizan para valorar la calidad de una película. Sin embargo, no todas son válidas. Lamentablemente en esto del cine se tiende a confundir lo que nos gusta o lo que no nos gusta con lo que es bueno o malo, algo que no se hace en ningún otro orden de la vida. A mí, por ejemplo, los vehículos que fabrica la marca Mercedes no me gustan especialmente pero, no puedo negar que son buenos coches. Coches de calidad. Cualquier experto en motor me lo diría.
Calificar las películas como buenas o malas según si nos han gustado o no es pasarse por el arco del triunfo todos los criterios de calidad que seguiríamos al analizar cualquier otro producto. Pongamos por caso alguien a quien no le gusten las películas de terror. Automáticamente consideraría malas cientos de películas entre las que se incluyen algunas auténticas joyas del séptimo arte (El exorcista, El resplandor,…). Más aún, pensemos en alguien a quien no le guste ver violencia en el cine, o alguien a quien solo le gusten las comedias románticas…
El gusto es subjetivo pero no tiene nada que ver con la calidad de un film que puede medirse de una forma objetiva como un todo, pero también como la suma de sus partes. No admito discusión en esto y no me sirve lo de recurrir a que “estamos hablando de arte”. No. No todo el cine es arte ni pretende serlo. De la misma manera que no todo lo que se escribe es literatura ni lo pretende.
Gran parte del problema de valoración la tienen también los premios que, mal que me pese, muchas veces no responden a criterios puramente cinematográficos sino al momento político o social que se vive en el mundo en el momento en que se celebra el certamen en cuestión. Esto es especialmente apreciable en los festivales no especializados. ¡Cuántas veces ha pasado que una película que gana chorrocientos premios es después olvidada mientras que, las grandes perdedoras de ese mismo año perduran en el tiempo!
Ejemplos: Fahrenheit 9/11 no es una buena película. No aporta nada nuevo al lenguaje cinematográfico ni utiliza sus recursos con gran habilidad ni es un derroche de estilo. Ni siquiera es un buen documental. Es tendencioso, panfletario y sensacionalista. Sin embargo, a mí y a mucha gente nos gusta y además ganó en Cannes, probablemente el certamen cinematográfico de mayor prestigio en todo el mundo. Los motivos de esta victoria y del por qué mucha gente la considera una buena película son obvios: atacaba directamente a Bush, un personaje al que medio mundo odia.
Esta misma reflexión podría hacerse sobre Una verdad incómoda.
Pero no nos detengamos en los documentales. Vayamos a por una película y además una película nuestra: Mar adentro.
Premiada, taquillazo, tenida por lo que en España se puede considerar buen cine y comprometido. Pero en el fondo, no es una buena película. En realidad, probablemente sea la peor película que ha dirigido Alejandro Amenábar. Carece del nervio y del riesgo de sus anteriores producciones. Su planificación se reduce a plano y contraplano en conversaciones interminables que pretenden ser trascendentes, apoyadas en los poemas en off del protagonista y en una música que no deja de subrayar cada escena con grandilocuencia, como si se nos estuviera explicando la mayor tragedia jamás contada. No obstante, como indicaba antes, una película no es solo un todo sino también la suma de sus partes y, Mar adentro, tiene también sus virtudes; los actores están estupendos (aunque como dijo Gasset, lo del acento gallego de Bardem era un poco ridículo). Probablemente funcionaría mejor como obra de teatro que como cine.
Es precisamente esa valoración por partes lo que nos permite leer el cine a distintos niveles y llegar a concluir que, films como 30 dias de oscuridad, lejos de ser una obra maestra, sí contienen momentos de buena realización, por ejemplo. Y no necesitan tratar de ninguna cuestión social trascendental ni de hacer crítica expresa al momento político actual para ser valorada en justicia. En justicia cinematográfica. En montaje, en puesta en escena, en interpretación, en uso de la luz, en planificación,…
Otro gran error a la hora de valorar una película es hacer hincapié únicamente en la historia que se nos narra.
La historia es tan solo una parte más. Una parte de una parte (el guión).
Pensemos en otro film de éxito; Matrix. A muchos de sus fans les pareció original la historia pero, en realidad, la historia es lo menos original de la película; trama mesiánica (lo del elegido redentor está ya en la Biblia además de en mil películas como puedan ser Dune, Mad Max más allá de la cúpula del trueno, etc), relación discípulo-maestro (que sin ir más lejos lo tienes en Star Wars, en El nombre de la rosa y en mil películas más), chico conoce chica (sin comentarios) y el bien contra el mal (aquí los hombres contra las máquinas, que tampoco tiene nada de original y sino que le pregunten a Kubrick o a James Cameron).
Lo que vende Matrix, lo que la convierte en una película fundamental del cine moderno (de la postmodernidad, en realidad) es su uso de los recursos cinematográficos, entre ellos el haber utilizado una nueva y prodigiosa forma de rodar escenas de acción y lucha (el ya célebre bullet-time) así como el uso del color para distinguir realidad de realidad virtual, el ritmo, el montaje, la ingeniería de sonido,…
La historia es tan solo una parte más.
Si cuando vamos al cine solo nos interesa la historia es que no hemos evolucionado mucho desde que oíamos a nuestra mamá cuando nos contaba un cuento para dormirnos.
O quizá sea que en realidad no nos gusta el cine.
Tan solo ver películas.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Joder! gran post, si señor.
Y aunq es largo esta vez no lo parece por q es muy interesante. Y me aventuro a decir, que me apetece otro mas, por q todavia no esta limpio el grano.

Coincido contigo en los films q citas. Y q es verdad q muchas veces tras ver una buen peli, saves q no te gusta y no saves por q, ya q los actores estan bien, la historia bien, direccion musica, etc.. pero no te gusta. Xq?

Salu2

Carabiru dijo...

Me gusta cuando la gente escribe cosas sobre las que sabe más que yo, apenas puedo comentar nada, pero me encanta aprender aunque sea un poquito.

:)

Axl dijo...

Lo cierto es que pienso que no sea algo que pase con el cine en exclusividad. . .otro ejemplo simple de lo mismo pasa con la comida. Aunque con el tiempo te educan a que cambies el 'está malo' o el manido 'que asco!' por un 'no me gusta'; mucho más respetuoso con el resto de comensales.

A pesar de compartir al 100% lo que dices, eso os deja a unos cuantos 'ilustrados' como única fuente de valoración real, ya que lo del resto es subjetivo. . .teniendolo en cuenta y/o siendo respetuoso en el lenguaje no hace falta mucho más, no?? Aunque yo lo he dicho no deja de sonar entre pedante y 'quieroynopuedo' el decir, 'El Paciente Inglés' es una peli hecha de maravilla pero que a mi se me hizo larga, poco clara de guión y con todos los respetos al desafortunado Mingella un quiero-hacer-una-buena-peli,
-pero-me-pierdo-y-aburro-al-personal. . .

Pienso que el post se resume en un 'sé dialecticamente respetuoso y si no sabes simplemente opina, pero no hagas valoraciones', lo mismo que con el futbol, la política, etc. . .y supongo que como en éstos mismos temas caeremos en breve en eso de 'Abuela, que le ha parecido la película?'; 'yo es que como de cine no entiendo. . .'

El Gran C dijo...

DUDE: gracias. Debido al éxito es probable que haya una segunda parte pero no creo que sea en mi próximo post.
Creo que esa aparente contradicción de reconocer un buen film y que al mismo tiempo admitas que no te gusta no debe ser preocupante.
Hay muchos factores que pueden distanciarnos de un fin de calidad. Nuestra educación, los prejuicios, el momento en que lo vemos, nuestros conocimientos,...

CARBIRU: te agradezco lo que dices pero, como ya te dije hace mucho en su dia, no tengas miedo de comentar lo que quieras o de expresar tu opinión.
No voy de profe gruñón aunque a veces lo parezca ;)

AXL: no creo que sea cuestión de de "iluminados".
Sencillamente se trata de ser justos con el trabajo que han hecho otras personas y de hablar con propiedad.
Si algo no te gusta, no te gusta. Cuando hablas con los amigos puedes usar tu gusto para no recomendar la película. La distintición está en decir "es una mala película". Esto debe justificarse y para ello hay que tener argumentos. Si a alguien no le gusta El sexto sentido no admito que diga que es mala porque las pelis de fantasmas no le gustan. Eso es un problema suyo que no tiene nada que ver con la calidad de un film.
Sobre El paciente inglés... Bien. Yo creo que Fiennes nunca ha estado mejor. Creo que la banda sonora y la fotografía son de lo mejor que he visto, sacando el máximo partido a las escenas en el desierto.
Ahora bien, puede que el ritmo sea algo lento. No obstante una película de corte romántico como es El paciente tiene su tempo. Pero puedo entender que a algunas personas se les haga algo pesada. No eres el único que me ha dicho que se aburrió viéndola.

Mar Goizueta dijo...

Supongo que cada película puede gustar por una cosa, independientemente de que se piense que es buena o no. Puede gustarte la historia aunque esté mal hecha o puedes apreciar la calidad artística y pensar que es un aburrimiento. Es como los libros, los hay que se disfrutan por la maestría con la que están escritos, otros porque lo que cuentan nos gusta y otros por todo

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo contigo! Me duele admitirlo porque me encanta Amenábar y me gustó mucho Mar Adentro, pero puede que no sea tan buena película, de hecho es la que menos me gusta del director y no se por qué!! (aunque no estoy diciendo que sea mala).

A mi me ha pasado lo que dices con La Soledad. Me pareció aburrida, y tengo pocas ganas de volver a verla, pero creo que es una buena película. Es arriesgada y aporta novedades interesantes...¡¡que no pueda entender una película no implica que sea mala!! Lo mismo me pasa con las películas orientales...No las entiendo, pero son muy atractivas visualmente y se nota que son buenas! Sólo falta que YO aprenda a entender esa otra forma de hacer cine!!
Saludos!

El Gran C dijo...

MAR: No podría estar más de acuerdo. Ahí está Stephen King por ejemplo. Acaso es tan bueno? O, siendo justos, son todas sus novelas dignas de convertirse en best sellers?? Rotundamente no.

ROSE: Así es. Cuanta gente hay que reconoce la calidad de, por ejemplo, una película como 2001 una odisea del espacio y en realidad no la entiende.
Está claro, no obstante, que cuanto más cine se ve, más se lee sobre cine y más se aproxima uno a las artes en general, más y mejor disfruta de ello.

Kike dijo...

Obviamente no es lo mismo que te guste (o no te guste) una peli a que sea buena (o mala). Hay que saber diferenciar, aunque en ocasiones resulte difícil.

El Gran C dijo...

KIKE: esa es la cuestión pero, para hacer la separación entre ambos conceptos, hay que entender un poco del tema. El problema es que mucha gente cree, que por el mero hecho de ir al cine de vez en cuando, ya entiende de cine.